La mejor manera de tomar agua

Ni saborizada, ni en tés, ni en sopas, porque se enlentece su absorción. Si de hidratarse se trata, el agua es irremplazable. Sin embargo, hay cinco puntos que tomar en cuenta para aprovechar sus beneficios.




Paula 1211. Sábado 22 de octubre de 2016.

¿Cuál agua tomar?

Los especialistas coinciden: en Chile el agua de la llave es adecuada. Cumple la norma nacional de calidad del agua que está basada en la Guía para la Calidad del Agua Potable de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

¿Existe una temperatura ideal?

Tibia o a la temperatura que sale de la llave, que es cercana a los 15 °C, para que en la trayectoria hasta el estómago alcance los 36, la temperatura corporal, y se absorba rápidamente. Si el agua se toma más caliente, demora más en absorberse, ya que el sistema digestivo tiene que bajar su temperatura.

Si se toma muy fría, el proceso también se enlentece.

¿Cuánta agua tomar?

En el caso de los adultos, la OMS recomienda consumir un litro diario cada 35 kilos de peso. Es decir, una persona que pesa 70 kilos debiese tomar dos litros de agua al día. Si el organismo recibe de manera constante menos de esa cantidad, la orina se híper concentra y se pueden producir cálculos. En caso de recibir más, el riñón se sobrecarga de trabajo y a la larga puede verse dañado.

¿Cómo tomarla?

No hay que tomar toda el agua diaria recomendada de una vez ni esperar a tener sed para hacerlo. Cuando sentimos sed, el cuerpo está expresando ya los primeros signos de deshidratación. Se recomienda, entonces, tener una rutina ordenada y beber en la mañana, a mediodía, en la tarde y dos horas antes de dormir, al menos un vaso para mantenerse hidratado durante el sueño. No importa si es antes, durante o después de las comidas. Si se ha hecho actividad física lo indicado es tomar al menos medio litro de agua para recuperar lo perdido a través de la transpiración.

¿Sirve tomar en ayuno?

La rutina de tomar agua justo después de despertar en la mañana permite limpiar los restos de alimentos del intestino, lo prepara para recibir nuevos nutrientes y permite aliviar la digestión.

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