Enamorada y sin estrés

Se está haciendo una casa a orillas del mar y sólo volvería a la tele si le ofecen un proyecto donde pueda ser la auténtica Eli de Caso. Por ahora, disfruta de un nuevo viejo amor y se inyecta plaquetas de su propio plasma para verse sin ni media arruga. Ahora en revista Paula las entrevistas de Monserrat Álvarez en La poca vergüenza, de radio Paula FM. Lee aquí lo que antes escuchaste.




Alo, Eli?

Hola gordita.

¿Qué echas de menos de estar en la televisión hoy?

Estar en esa comunicación directa con la pantalla en un plano cerrado, conversando con la gente.

¿Volverías a la tele?

Volvería feliz, siempre y cuando las condiciones sean entretenidas. Ponte tú, un programa que tenga que ver con lo que a mí me gusta, lo más auténtico. Nada políticamente correcto.

¿Estás cada día más incorrecta?

Cada día más libre.

Pero siempre lo has sido. ¿Ahora ya estás peligrosa?

Nunca voy a ser peligrosa porque no soy loca, no soy desubicada.

¿Me vas a decir que no eres un poco loca, Eli?

Sí, tengo un grado de locura, pero cuerda.

¿Cuál es la última locura que has hecho?

Me volví a enamorar. Y creo que del hombre indicado.

Qué emocionante.

Estuve como tres años sola. Más te diría yo, como cuatro y hasta cinco años…

Puros affairs.

Ni siquiera un affaire, vieja, porque no soy de affaire. Éste es un hombre con el que yo tuve un amor hace más de veinte años.

Pero a ti te ha pasado más de una vez eso de caer perdidamente enamorada.

Sí, pero fíjate que no sé si es porque estoy más grande, porque aprendí a quererme, a valorarme, a darme cuenta de lo que realmente necesito. Y apareció este hombre cuando tenía que aparecer.

Me acuerdo que anduviste con un muchacho más joven que tú...

Esa relación terminó y después hice todos los trabajos que no había hecho antes conmigo.

¿Cuáles serían esos trabajos?

Conocerme. Darme cuenta de quién soy realmente.

Pero Eli, tú siempre has sido de introspección. ¿Cómo es eso de que no te conocías y que te vienes conociendo ahora?

Monserrat, yo tenía muchas necesidades económicas, muchas responsabilidades familiares. Siempre me tocó apagar muchos incendios sola, entonces no tenía tiempo para mirarme, para darme cuenta de lo que yo necesitaba.

¿Cómo llegó este amor viejo que se volvió nuevo?

Este hombre tenía que caer por el orden divino de la vida. Porque las personas llegan cuando tienen que llegar, cuando tú lo has deseado, has trabajado, has esperado. A este hombre lo creé yo enmicabeza, en mis sentimientos, en mi subconsciente. Y, de repente, se materializó.

¿Fue muy sorpresivo cuando apareció?

No, porque lo estaba esperando. No sabía que era él, pero era él, porque me lo imaginé hasta físicamente.

Ah, qué emocionante.

Es muy excepcional lo que me ha pasado. Un día apareció en Chile, porque él no vive aquí. Yo estuve buscándolo durante diez años.

¿Lo buscabas con nombre y apellido?

Lo busqué, hacía llamados para que se contactara conmigo, y él no quiso, porque estaba muy herido. Yo le quería pedir perdón.

¿Te habías portado mal en el pasado?

Tuvimos una relación y después yo me desaparecí.

Y ahora, de vuelta, ¿es pololeo o amor con camas y petacas?

Estamos construyéndonos una casa. Esto es de verdad.

¿Sigues vendiendo seguros?

No, ya no. Sólo sigo con mi programa en radio Agricultura. Igual rico no matarse trabajando todo el día. Eso tiene que ver con los cambios. Necesitaba darme espacios, volver a cocinar, a hacer manualidades. Como que he vuelto a ser yo. No estoy estresada, tengo las mañanas libres, almuerzo con mis amigas. No me he dejado tentar por proyectos que pueden ser una vuelta al infierno.

¿Cuántas veces en tu vida has tenido que recurrir al sicólogo o al siquiatra para lograr un mayor equilibrio espiritual?

Una vez.

¿A qué recurres? ¿A Paulo Coelho?

Hago oración y leo literatura que tiene que ver con Jesús. Ahora estoy leyendo El libro de los milagros.

Para calmar el nervio, ¿sexo, pisco sour, shopping o deporte?

Sexo de todas maneras. Una buena caminata, mucha naturaleza, estar en contacto con los animales. Eso es lo que mejor me hace.

Hablando de sexo, ¿qué cosa o circunstancia logra anularte la libido por completo?

Una mala onda del día, un mal trato, una mala palabra, un mal gesto.

Cuando el cansancio agobia, ¿cuál es tu secreto para despertar la libido?

Meditación trascendental.

¡Pero eso es como antisexual!

No, mi amor, la meditación trascendental es una técnica con un mantra que repites durante veinte minutos mentalmente, sentada, con la espalda apoyada, en un ambiente sin ruidos. Es como dormir ocho horas.

¿Ahí quedas lista para cualquier exigencia de la vida?

Es espectacular. Debería estar en los colegios, en las universidades y en las empresas.

¿Mientras más años a cuestas, más te cuesta y menos te acuestas?

No, al revés.

No te puedo creer. ¿Tienes más deseo sexual que antes?

Pero total.

Ah, bueno, pero es que tienes nuevo amor.

No, es el amor verdadero, vieja. No es el amor nuevo.

Cuando te miras al espejo, ¿qué parte de ti no logra conformarte?

Encuentro que estoy un poco gorda de caderas. Con esto del amor, uno se da gustitos.

¿Sigues sin arrugas? Porque una de las cosas increíbles es que no tenías arrugas.

No, no tengo arrugas gracias a Dios, gordita.

¿Bótox o cirugía estética?

PRP, Plasma Rico en Plaquetas. Te sacan un poco de sangre, la licuan, separan el plasma, le sacan las plaquetas y te inyectan eso en tu cara o en tu cuerpo. Donde tú quieras.

Qué nervios. ¿Qué produce eso?

Te esponja, te da una tonicidad mejor en la piel.

¿A qué edad melo tengo que empezar a hacer?

Ahora.·

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