La bestia de la TV

Francisca García-Huidobro –conductora de Primer plano y jurado de Talento chileno, ambos programas de Chilevisión– entendió que para permanecer en pantalla hay que crear una bestia que hay que alimentar: cada escándalo, cada entrevista, cada foto es un nuevo bocado. A siete años de haber entrado al negocio de la farándula, Francisca es la mujer más potente de la televisión.




De niña vivió en muchas casas y pasó por muchos barrios: Ñuñoa, Providencia, Las Condes, El Arrayán, La Reina. "Mi papá tenía una fábrica de estructuras metálicas y a veces le pagaban con una casa", cuenta mientras fuma su tercer o cuarto cigarro desde que llegó, vestida con un buzo deportivo negro, unos grandes anteojos negros y una cartera Louis Vuitton gris, de charol. En una bolsa tiene unos zapatos negros altísimos que acarrea a todas las sesiones de fotos. "¿Usas mucho el strapless?", le pregunto.

"Sí, me gustan mis hombros y mis brazos. Los tengo medios abandonados, hace siete meses que no voy al gimnasio. Voy a cumplir 37 años y tengo que ponerme las pilas de nuevo. En cinco años se me va a caer todo y levantarlo será mucho más complicado. Por eso uso strapless. Y vestidos muy cortos y tacos muy altos, porque tengo las piernas cortas y, claro, jamás con pulsera en el tobillo, porque te corta todo el paté", me dice con impactante seguridad mientras posa arriba de sus tacones.

Luego de cuatro colegios, dos años de licenciatura en Historia y de terminar Actuación en la Escuela de Gustavo Meza, Francisca llegó a las teleseries. Desde 1997 hizo seis seguidas hasta que en 2002 se quedó sin trabajo fijo. No había ahorrado ni un peso, así es que vendió su auto y se quedó a pata. "De esa época son todas las cosas que hice pilucha, unas fotos en la revista H y en LaNación y un capítulo en El cuento del tío, de Carlos Pinto, que te pagaba mal, pero te daba un bono por salir pilucha.

¿Qué me decís? Te juro que el bono que me pagó no me alcanzó ni para diez centímetros cúbicos de la silicona que tengo puesta", cuenta muerta de la risa. Terminó entrando a SQP, el programa de farándula de Chilevisión, como comentarista de teatro.

Y aquí arranca lo ya conocido: duplica su aparición en la tele al sumarse al equipo de Primer plano, se empareja con el periodista Julio César Rodríguez, nace su hijo, es la época en que pregunta en cámara a sus invitadas "¿Tú eres puta?, ¿cuánto te pagan?". Y ahora comenta: "Miro los videos y me doy miedo". Cuando se separa públicamente, con escándalo de por medio, le pasan la misma aplanadora por encima.

Francisca, hoy, está lejos del viperino mundo de opinología y señala que es conductora de televisión. Sigue en Primer plano, de alguna manera dulcificada –aprendió a preguntar sin ofender–; en Fiebre de baile fue la villana de teleserie que siempre había querido ser, y ahora, en el exitoso Talento chileno, se ríe y a veces llora con las presentaciones de los concursantes. Desde que se separó, no tiene pareja y vive con Joaquín, su hijo de 5 años. Pero una mujer como Francisca García-Huidobro no está sola.

"Somos 6 hermanos, entre los tuyos, los míos y los nuestros. Yo tengo una familia disfuncional, que lo único que ha hecho es traerme más hermanos, madrastras, padrastros, abuelastros. Mi familia es mucha gente, mi hijo tiene cuatro abuelos", dice con cariño, aunque declara que su naturaleza es como la de su signo, Escorpión. "El Escorpión es perverso. Es un personaje fuerte, de ideas claras y autodestructivo", ruge, y entiendo esta frase como otra más del vocabulario de su bestia genial.

La gracia del chileno

En el programa Talento chileno te has encontrado con un Chile al que no estabas acostumbrada.

Yo tengo re poca paciencia, la tele grabada no me gusta. Pero veo cada cosa en el teatro donde grabamos el programa… Desde tipos talentosísimos hasta gente sin ningún sentido del ridículo. Y empiezas a cachar la gracia del chileno.

¿Qué te ocurre con el tema de la pobreza?

Me conmoví profundamente con un señor que cantó en Temuco y que era chofer de bus. Porque me lo imagino catorce horas arriba del bus, durmiendo en una litera, llegando a su casa a la hora del loly. Yo soy una afortunada y me conmueve profundamente saber lo difícil que es para el 95% restante. Si yo hubiera nacido en otras circunstancias habría terminado quizás en qué.

¿En qué?

Drogadicta, tal vez. Con el carácter que tenía de chica, en vez de pegarle a una compañera hubiera sacado un cuchillo, qué sé yo. En Talento chileno he llorado por todo, pasándome el rollo de lo que vive la gente y que yo tengo la suerte de no vivir. Aunque, al final del día, no somos tan diferentes, porque todos nos sentamos en el wáter. Son diferentes wáteres nomás.

¿Después de hacer Talento chileno no te rebelas contra Primer plano, tu programa de farándula?

¿Tú estás esperando que yo te responda cómo me siento después en mi casa? No salgo de Primer plano deprimida ni considerando que lo que hago no tiene ningún valor. Los dos programas me producen satisfacciones diferentes y sería injusto compararlas. Cuando me metí a la farándula, yo no tenía nada que perder. Lo que me quedaba era buscar pega con algún amigo de mi papá o de mi abuelo. No soy buena para arriesgarlo todo. Por eso me conmueve la gente que sí se arriesga.

¿Te da satisfacciones tu trabajo?

Sí, y te confieso que en los últimos dos años más. Sobre todo por esa cuestión del cariño de la gente. Me produce satisfacción que la gente le haya encontrado la vuelta a mi personaje y lo haya querido. Mi vida siempre ha sido así. En el colegio, de buenas a primeras, no tenía amigas. A la segunda vuelta era como: "Es maldita la Fran, pero divertida". Y a la tercera ya me querían. Yo soy una buena mina, soy súper leal. El único trabajo que he tenido que hacer durante mi adultez ha sido encontrar las palabras para no herir con lo que digo. Si eso lo vio la gente, se me cae, incluso, una lágrima de emoción.

¿Te imaginas sin la tele?

No, soy joven todavía, ¿para qué irme ahora? Me gusta y estoy disfrutándola, pero tengo una cabeza hiperkinética y se me ocurren tres programas a la semana y, aunque no soy periodista y es una patudez, me encantaría ser editora de ellos.

Los hombres

Tienes muchos amigos gays, eso te debe complicar para encontrar pareja.

No… Bueno, sí, es verdad. Se lo planteé en algún momento a mis amigos cuando, en la centésima junta, volvíamos a ser quince: catorce hombres y yo. Para la mujer es muy halagador, porque los gays son lo máximo pero, claro, no me colaboran con el asunto de la pareja. Estos últimos dos años me he reconciliado con la amistad entre mujeres y ahora tengo un montón de amigas solteras y separadas, así que ya no estoy rodeada sólo de amigos gays.

¿Te da lata el tema de los hombres?

¿En qué sentido? ¿Que me molesten porque no tengo pololo?

¿La gente te molesta por eso?

Es parte del negocio rellenar horas de farándula. Pero sí, pasan muchas horas al mes analizando cosas como que tanto triunfo y al final estoy sola, un tema repetitivo y machista.

A Camiroaga le hacen lo mismo.

¡Pero él tiene 44 años, está soltero y no tiene hijos! Yo siempre tuve pololos, toda mi vida. Nunca estuve tanto tiempo sin pareja como ahora. A esta edad una ya sabe qué quiere y qué no, entonces no estoy dispuesta a transar en ciertos planes. Y los grandes amores te hacen cambiar los planes, te hacen subir montañas que antes no estabas dispuesta a subir, y esa persona no ha llegado. Quizá me he equivocado en acomodarme en esta soledad que me permite libertades.

Ahora estás en un momento entretenido, en los pinchazos.

Sí, pero no soy la reina de las citas. Soy súper… iba a decir floja, pero capaz que sea asustada. De diez citas que puedo tener, en ocho empiezo con que me duele algo y me quedo en la casa…

¿Vas a citas a ciegas?

Sí, claro, pero no sola. Si alguien quiere presentarme a un amigo, tiene que bancarse la lata de acompañarme a la cita.

En esas citas, ¿eres amable o estás en el personaje?

La primera vez estoy más en el personaje, después me voy soltando. Los hombres tienen muchos prejuicios conmigo: ¡Ah!, la Francisca García-Huidobro de Primer plano, de la farándula, la pesada, la yegua, la dura… Ahora en Talento chileno seré la llorona…

La mina zafada

Leí que la búsqueda de colegio de tu hijo fue un calvario…

Sí, fue más doloroso que parirlo.

¿Por qué?

Porque me decían que no y me miraban con cara rara. Al final, como que me disfrazaba para las entrevistas. No soy llorona, pero me acuerdo de haber llamado a mi papá llorando desconsoladamente, diciéndole que nunca pensé que las decisiones que yo había tomado en mi vida influirían en esto.

¿Te costó encontrar colegio porque sales en la tele?

Mi hijo sabe leer desde que tiene tres años, aprendió solo. A mí no me digas que no está capacitado para entrar a un colegio... Por lo demás, tendríamos que ponernos de acuerdo sobre qué se puede evaluar en un niño a los tres años.

Algo se puede evaluar.

Además, me parece el colmo que los colegios se reserven el derecho a decirte por qué tu hijo no quedó. ¿Sabes por qué? Porque a mí me cuesta cincuenta lucas que mi hijo dé el examen de admisión. Y veo que hay 200 niños más, así que déjame sacar la cuenta para saber cómo se están forrando los colegios… Si hay una sicopedagoga, lo mínimo es que te entreguen la evaluación y te den una razón de por qué tu hijo no quedó. Pero no, te mandan una carta con harto ribete y pelotudez con un "siga participando".

¿Crees que tiene que ver con lo que tú haces?

Puede ser un poco egocéntrico de mi parte, ¿o no? Tiene que ver con lo que Julio y yo hacemos.

¿Puedes imaginarte sin tu hijo? Tengo una teoría de ti sin hijos.

Imposible. ¿Cómo crees tú que sería yo sin Joaquín?

Excesiva.

Nunca fui muy zafada, me portaba mal en el colegio, pero nunca tuvieron que ir a buscarme a una comisaría por copete.

pl57, francisca garcia huidobro

Te imaginaba como Amy Winehouse.

No. Muy lejos de la realidad, porque soy muy asustadiza. Tengo una personalidad adictiva, soy súper adicta al cigarro, a la coca-cola light, que ahora intento superar cambiándola por agua. Conozco mis propias limitaciones desde mucho antes de ser mamá, y hay cosas en las que prefiero no meterme.

¿Como las drogas, por ejemplo?

Drogas duras. No juzgo a nadie, soy una ferviente creyente de la libertad de cada uno de hacer de su cuerpo una farmacia si no le hace daño a nadie, pero yo ahí no me metería.

El otro día en el programa lanzaron un chiste sobre las hierbas…

Yo no me hago la tonta con ninguna droga, muchas de ellas en algún momento las probé y no me parecieron atractivas. Para los temas valóricos, como las drogas, la píldora del día después y el aborto terapéutico las autoridades tienden a tratar a la gente como idiota. ¿Cómo el país no va a estar preparado para discutir sobre ciertos temas?

¿Estás a favor del aborto?

Estoy a favor del aborto terapéutico, cuando peligra la vida de la madre por sobre la vida del hijo, o sea, con restricciones.

¿Y de la ley de unión civil?

Estoy a favor del matrimonio homosexual con los mismos derechos, como adopción.

Política y farándula

¿Te gusta Piñera?

Sí. Yo voté por la Concertación hasta ahora, en que voté por Piñera, y no creo que sea mi culpa, es culpa de la Concertación.

¿No había un candidato menos carismático para presentar?

¿Y qué te parece la Concertación? Está como hibernando, prometen que van a sacar a gente joven y que van a renovar los rostros, pero son los mismos.

¿Has pensado llevar la política a Primer plano? Podrían haber mostrado la separación de Carolina Tohá y Fulvio Rossi.

Me hubiese encantado tenerla. Y al diputado René Alinco. Y a Escalona cuando se pegaba charchazos con José Antonio Gómez. Pero en el programa ni siquiera se discute sobre esto. Yo siempre he dicho que deberíamos hablar de los políticos y los poderosos, pero ya ni los propongo, porque sé que no lo puedo hacer. Tengo dos opciones: amargarme de por vida por lo que no puedo hacer o disfrutar lo que sí puedo hacer.

¿La farándula es necesaria?

La farándula es para entretener. Nosotros somos un programa de investigación periodística, no somos un programa de opinología. No somos siete personas hablando de algo, somos un programa semanal y dependemos de la coyuntura.

¿Ya no eres opinóloga?

Creo que no. Meto muchas opiniones, pero opinóloga, así de sentarme cuarenta minutos a hablar si es verdad que Luis Miguel y Kenita pololearon, no.

¿Fuiste opinóloga?

Sí, claro, partí como opinóloga.

¿Y ahora qué eres?

Conductora de televisión.

Vacas sagradas

La ex opinóloga opina descarnadamente de los grandes personajes de la televisión chilena.

Don Francisco: "Nadie tiene derecho siquiera a hablar de él. Es un grande. Cuando llegó a Chile después del terremoto, la gente como que respiró".

Cecilia Bolocco: "¡Ay, es que yo soy fan de ella! La encuentro total, porque soy de esa generación frívola que creyó que era importante tener una Miss Universo. Yo salí a tocar la bocina cuando ganó".

Felipe Camiroaga: "No me gusta. No me gusta mucho en el matinal, no me gusta como entrevistador. He peleado demasiado con él, ya no me interesa".

Tonka Tomicic: "Me gusta. Encuentro que ha sido de un aperramiento la pobre... Televisa muy bien, es embrutecedoramente linda, ojalá le den un buen programa".

Rafa Araneda: "No soy su público, pero reconozco el manejo de masas que tiene. Se fue a México y ganó un premio en un país donde tienes que pedir disculpas en la calle si no eres mexicano".

Vivi Kreutzberger: "Me encantaba cuando llegó a la tele, después como que no me gustó mucho, se puso muy como rimbombante. Convirtió eso de reírse de ella misma en un deporte, que fue agotador. Pero esta última semana he pasado por su programa y me pareció que se está volviendo a divertir. Y, cuando ella se divierte, la gente se divierte".

Antonio Vodanovic: "Maestro. Ha sido muy entretenido trabajar con él en Talento chileno. Sabe mucho, imagínate lo que es para mí ser jurado con él. Me creo un poco la muerte en verdad… Dijo que no volvía a Viña, pero su ring tone es la cortina del festival".

Julián Elfenbein: "No puedo ser objetiva. Encuentro que es el rostro masculino de la televisión 2010. Es guapo, talentoso, divertido, rápido y súper generoso como compañero de trabajo".

Raquel Argandoña: "¡Ay, qué lata hablar de ella! No es animadora, es una gran opinóloga de farándula y una gran invitada de estelares. Pero Raquel Argandoña no está en el Olimpo, si pelea a los hijos en los tribunales. Está como a 200 metros de llegar, capaz que haya estado y bajó a mirar algo, capaz que vuelva, no sé".

Raquel Calderón: "Acostumbrados como estábamos a estos chiquillos jóvenes, sin mucho vocabulario ni mucha cultura, que entre el tirón de pelo y el vaso del copete en la discoteque surja esta niñita de 19 años que habla bien y se maneja perfecto... Se nota que fue criada en el rigor de la televisión. Es y va a seguir siendo un personaje de televisión muy interesante por mucho rato".

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.