Células madre y el futuro de la belleza

Las células madre han irrumpido en el mercado de la cosmética, prometiendo ser la panacea para detener el envejecimiento.Consultados por Paula, investigadores del Seishin Regenerative Medicine Center de Japón adelantan sus impresionantes beneficios en cirugía estética y científicos de Harvard cuestionan su eficacia en cremas.




No hay universidad de prestigio que no cuente con un centro de investigación ciento por ciento dedicado al desarrollo de células madre. Ni clínica que no tenga un equipo estudiándolas. Ni país en el mundo donde los científicos desconfíen de su potencial en el futuro de la medicina. Es que nadie discute que actualmente en el campo científico las células madre son las protagonistas. Presentes en todo tipo de organismos multicelulares –ya sea de animales o plantas– su principal característica es la capacidad de autorrenovarse o de diferenciarse en la forma de una célula específica, lo que significa que una célula madre potencialmente puede convertirse en células de piel, sangre u órganos. Esta capacidad regenerativa podría ser la respuesta a problemas médicos de gran envergadura, como los trasplantes de órganos, reconstrucción de tejidos y quemaduras en la piel.

Mientras los investigadores se abocan con todos sus esfuerzos para encontrar la forma de utilizar estas células, el mundo de los cosméticos asegura que ya cuentan con productos y procedimientos que las incorporan en sus fórmulas, prometiendo regenerar la piel y terminar con las arrugas. Y, como se trata de productos de última tecnología, son las cremas más caras del mercado.

Sospecha científica

Sin duda, el término "célula madre" cada día gana más prestigio. Tras la irrupción mundial de bancos de sangre que preservan cordones umbilicales de recién nacidos para contar con esas células en caso de futuras enfermedades –como leucemia y otros cánceres– ganaron buena fama. Reconocimiento que ha sido rentabilizado por la industria cosmética que los incluye en sus etiquetas. Sin embargo, no existe ninguna evidencia científica que justifique su eficacia en esta área. Consultado por Paula, William Lensch, –director de la escuela de educación del Instituto de Células Madre de la Universidad de Harvard–, señala: "Cualquier producto que asegure ser capaz de hacer más de lo que hace me causa preocupación. Y el tema con este tipo de productos es justamente ese: esto está siendo usado como estrategia de marketing, que no corresponde con la realidad", asegura. Lensch va más lejos: "No conozco ninguna investigación seria sobre el uso de células madre en cosméticos. Nuestro instituto está enfocado en comprender y solucionar temas de vida o muerte, como buscar soluciones para enfermedades coronarias, diabetes y problemas en los tejidos, y ninguna de estas enfermedades cuenta actualmente con tratamientos en base a células madre. Esto es una muestra más de la enorme diferencia de criterios entre el mundo médico y la industria de la belleza", sentencia.

"La investigación está recién comenzando. Falta comprobar el potencial de células madre en animales y humanos", asegura desde Nueva York la dermatóloga Marina Peredo, quien aplicó a sus pacientes productos con células madre de plantas, sin obtener resultados.

El juego, asegura el experto, está en el uso de las palabras: efectivamente estos productos cuentan con extractos de éstas, pero provienen de plantas, cuyas propiedades regeneradoras en seres humanos no están comprobadas. Martín Montecino, director del Centro de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Andrés Bello y subdirector del Centro FONDAP de regulación del genoma, comparte la sospecha. "Esas células pueden regenerar células de plantas. No existe ninguna evidencia que indique que puedan servir en humanos", asegura. "Y, respecto a células madre de mamíferos o humanos, todo lo que se está haciendo está en una etapa completamente experimental, no ha sido incorporado al mercado".

Desde Nueva York, la dermatóloga Marina Peredo, asegura vía telefónica que el uso de células madre de humanos o mamíferos podría significar una revolución en la cosmética y mejorar notablemente la apariencia de la piel, pero afirma que se trata de un desarrollo incipiente y que hay un larguísimo camino por recorrer. Lo que está claro, y en eso coincide con los otros expertos consultados, es que las células que provienen de vegetales no han demostrado efecto alguno en humanos. Actualmente ella realiza un estudio para desarrollar productos hechos en base a células madre. En la primera fase del estudio aplicó a veinte pacientes productos con células madre de plantas y no hubo respuestas significativas. Por esto, la segunda etapa de su investigación en proceso consiste en la aplicación de productos hechos con células madre de mamíferos y, la tercera, será utilizar humanas. "La investigación de estos productos está recién comenzando. Ahora falta comprobar el potencial de células madre de animales y humanos", asegura. "Si se confirma su eficacia en la cosmética, sería una revolución para el mercado", señala Peredo.

La nueva promesa

Más allá de las cremas y productos cosméticos, en el mundo de la belleza existen nuevos procedimientos que involucran el uso de células madre. La medicina regenerativa, con su base de estudios en Japón y Corea, lleva más de diez años estudiando cómo aplicarlas para aumentar mamas o realizar lifting. El procedimiento es así: se extrae grasa de las caderas o el abdomen del paciente, de ese tejido adiposo se aíslan células madre y luego estas se vuelven a aplicar en el busto o el rostro. Al usar las células madre del mismo paciente no hay riesgos de que sean rechazadas.

Desde Japón, vía email, el doctor Tatsuro Kamakura, –director general del Seishin Regenerative Medicine Center de ese país– señala que 80% de las pacientes que se han realizado cirugías como lifting, aumento de mamas o de cadera, utilizando este procedimiento, han obtenido buenos resultados. "Hasta el minuto hemos realizado 200 operaciones exitosas de aumento de busto con células madre. Los pacientes sienten que esta técnica es menos invasiva que los trasplantes, y el resultado es mucho más natural", señala. A pesar de los resultados, Kamakura asegura que el estudio continúa y este año comenzará una investigación sobre células madre y rejuvenecimiento de la piel.

La tendencia recientemente llegó a Chile, donde también se realizan este tipo de procedimientos, aplicando células madre directamente en la piel, para generar procesos de renovación. Es ambulatorio y mucho menos invasivo que una cirugía. El doctor Víctor Hugo Correa, dermatólogo y director médico del centro Vitaclinic, asegura que los riesgos "son simplemente la falta de experiencia en el largo plazo, porque esta tecnología está en la frontera de la ciencia aplicada en humanos. Es segura y tiene una enorme proyección". Una voz optimista en medio del debate: "Esta definidamente es la década de las células madre y de la medicina regenerativa", afirma.

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