Almorzar en una viña

Dos buenas opciones para planificar un copioso almuerzo por el día en el Valle de Casablanca.




Paula 1111. Sábado 22 de diciembre de 2012.

Dos buenas opciones para planificar un copioso almuerzo por el día en el Valle de Casablanca. Por Rosanna Sánchez. 

Viña Casas del Bosque

La cocina de autor del chef Álvaro Larraguibel, basada en ingredientes locales del Valle de Casablanca y que desde hace un tiempo es el sello del restorán Tanino, ahora también se puede disfrutar en la recién inaugurada Casa Mirador, ubicada en el punto más alto de la viña Casas del Bosque. Desde el comedor se tienen vistas insuperables sobre más de 200 hectáreas de viñedos y del tranque que irriga los campos de la viña, elegida como la mejor para visitar en Chile según Le Winery Guide, del brasileño Flávio Faria. Ideado para recibir grupos pequeños de visitas en un espacio más íntimo, el lugar tiene capacidad para 22 personas y una cocina donde personalmente el chef Larraguibel cocina y comparte con los comensales.

El menú varía según la ocasión entre varias alternativas: fuego y tierra (asado de cordero patagónico, filetes angus, carne de wagyú y ensaladas); mar y tierra (mariscos y pescados a las brasas), y dos menús de degustación de seis tiempos. El maridaje es con vinos de edición limitada como la línea pequeĖas producciones –pinot noir, sauvignon blanc y syrah– y con las etiquetas ícono Gran Bosque y Gran Estate Selection. Reservas con al menos una semana de anticipación. Fono 2377 9431, cel 7967 7320, turismo@casasdelbosque.cl

Además de exclusivos almuerzos en la nueva Casa Mirador, en la viña Casas del Bosque funciona Tanino, uno de los 20 mejores restoranes de viñas del mundo según la revista canadiense Wineaccess. También se organizan paseos en bicicleta (desde $ 7.000), picnic ($ 20.000) y tours de degustación (desde $ 12.000). Hijuela 2, ex fundo Santa Rosa. www.casasdelbosque.cl

Mesa pop up en House Casa del Vino

Desde principios de noviembre y hasta fines de enero, en House Casa del Vino (ex Viña Morandé) funciona una mesa pop-up: disponible para ser reservada solo los miércoles o sábados, los comensales no solo eligen el lugar de la bodega donde quieren comer –el parque, los viñedos, la sombra de un árbol–, sino que también afinan el menú de seis tiempos a degustar donde, entre otras opciones, pueden optar por croquetas de polenta y jamón de wagyú, entraña con puré de pallares y filete de mero con zapallo. En la fecha convenida, la cena es supervisada personalmente por el chef del restorán y un sommelier que va sugiriendo el maridaje para cada plato. La experiencia cuesta $ 50.000 por persona. Ruta 68, km 61, Valle de Casablanca. Fono (32) 275 4701. P.N.

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