El feminismo exaltado de Caitlin Moran

La inglesa (38 años, 300 mil seguidores en twitter) es famosa por ser una divertida comentarista en televisión y escribir sobre farándula en The Times desde los 17 años. Además, es autora de un best seller genial en el que parte del clásico dictum de Simone de Beauvoir –"una mujer no nace, se hace"– para contar su historia y postular un nuevo feminismo con tolerancia cero al machismo.




Paula 1124. Sábado 22 de junio 2013.

La inglesa (38 años, 300 mil seguidores en twitter) es famosa por ser una divertida comentarista en televisión y escribir sobre farándula en The Times desde los 17 años. Además, es autora de un best seller genial en el que parte del clásico dictum de Simone de Beauvoir –"una mujer no nace, se hace"– para contar su historia y postular un nuevo feminismo con tolerancia cero al machismo.

Desde el recuerdo de sus tristes y humillantes 13 años, cuando era gorda, fea, melancólica, aburrida y mal vestida, Caitlin Moran narra en Cómo ser mujer –considerado el libro del año por el público inglés de 2011 y recién traducido al castellano (Anagrama)– la milagrosa y difícil aventura de convertirse en una chica sexuada, pensante y con vida propia –aún un poco gorda, pero estilosa, famosa y alegremente vociferante–. Con un sentido del humor a toda prueba, referencias constantes al lado más pop y bastardo de la cultura, y un sentido crítico para nada ligero, Moran quiere encarnar lo que ella llama "feminismo exaltado" y la "tolerancia cero" a la cultura del patriarcado. Es decir, plantear toda la cuestión de ser mujer de nuevo, desfachatada y honestamente.

Con referencias constantes al lado más pop y bastardo de la cultura, y un sentido crítico nada ligero, Moran quiere encarnar lo que ella llama "feminismo exaltado" y la "tolerancia cero" a la cultura del patriarcado. Es decir, plantear toda la cuestión de ser mujer de nuevo, desfachatada y honestamente.

Sus divagaciones van desde su primera menstruación y siguen en la planificación estratégica de la depilación; desde la lectura compulsiva para encontrar una heroína hasta la búsqueda desesperada de porno de calidad. Ante todo, lo que quiere Moran es eliminar la estela de tragedia y victimismo que empaña la liberación femenina: "Si muestras a cualquier joven una de nuestras heroicas pioneras –Sylvia Plath, Dorothy Parker, Frida Kahlo, Cleopatra, Boudicca, Juana de Arco–, le estarás mostrando casi siempre a una mujer que acabó aplastada", dice. Y sabe que para aportar y convencer a sus lectoras no basta con contar su propia emancipación, sino que tiene que ampliar el campo de batalla: "Sí, la vieja 'concienciación' feminista continúa teniendo un valor enorme. Cuando se tratan temas como el aborto, las operaciones estéticas, los partos, la maternidad, el sexo, el amor, el trabajo, la misoginia, el miedo, o cómo se siente una dentro de su propia piel, las mujeres siguen sin contarse muchas veces la verdad, excepto cuando están muy, muy borrachas. Es posible que el número cada vez mayor de mujeres que, según los estudios, bebe compulsivamente, no sea más que un intento de la mujer moderna de mejorar la comunicación entre ellas", escribe con característico humor mordaz y certero.

Ella, con una narración que parece ebria por lo llena de verdades, y una cultura amplia, revisa cada tema con fervor, desde la moda y la belleza hasta la maternidad y la misma muerte.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.