Francisca Casas

Modelo, licenciada en Arte de la Universidad Católica y ejecutiva de cuentas de una agencia de marketing digital, Francisca Casas (27 años) se mueve por Santiago en bicicleta, practica yoga ashtanga al menos tres veces por semana y, apenas abre un ojo en la mañana, se toma dos o tres vasos de agua. Esta es su rutina de cuidados.




Paula 1133. Sábado 26 de octubre 2013.

Modelo, licenciada en Arte de la Universidad Católica y ejecutiva de cuentas de una agencia de marketing digital, Francisca Casas (27 años) se mueve por Santiago en bicicleta, practica yoga ashtanga al menos tres veces por semana y, apenas abre un ojo en la mañana, se toma dos o tres vasos de agua. Esta es su rutina de cuidados.

Mi cara y mi cuerpo

"Me lavo la cara con el Mousse Nettoyante Cleansing Foam, de la línea Forever Youth Liberator, de Yves Saint Laurent, y la hidrato con la crema de la misma línea con factor 15. Me maquillo muy poco y solo cuando salgo: me delineo los ojos estilo eye cat con el lápiz Shocking, de Yves Saint Laurent, que es como un pincel muy fácil de usar. No uso ni base ni labial. En la noche uso los mismos productos que en la mañana para limpiar e hidratar la cara. Después de la ducha me aplico cualquier crema hidratante de cuerpo que tenga a mano".

Mi alimentación

"Mi día parte siempre con dos o tres vasos de agua en ayunas. Una amiga me dio ese dato hace un par de años y es lo mejor, porque empiezas a limpiar el cuerpo antes de comer. Durante el día tomo varios vasos más, me da lo mismo si es agua filtrada, mineral o de la llave. Junto a eso mi regla es jamás comer frituras ni comida rápida y consumir muy pocos lácteos, prefiero las leches vegetales de soya o almendra que compro en el Jumbo. Mi desayuno siempre es con un jugo de pomelo rosado recién exprimido y un pan pita tostado con jamón de pavo o palta. A media mañana me como una fruta y luego almuerzo ensalada con alguna proteína como pollo o pescado. A media tarde me tomo un té verde, mi favorito es el Sencha de Twinings que se compra a granel en Whittard (Parque Arauco, local 135), con una galleta de arroz. En la noche me como una ensalada, no más allá de las nueve".

Nada de tratamientos

"Tengo piel sensible y sufro de rosácea, pero siempre que me hago algún tratamiento me lleno de granos, así que me rendí. Asumí que soy más roja que el resto".

Mi pelo

"La única persona que tiene permiso para tocarme el pelo es Gonzalo Saavedra, dueño de Leonidas Hairdresser (Girardi 1348, fono 2504 8976), quien me lo corta hace más de un año. Recientemente me hizo una melena que quiero mantener, así es que me la tendré que cortar cada dos meses. Creo que el secreto de un pelo bonito es lavárselo poco. A mí me funciona lavarlo cada tres o cuatro días, rotando constantemente de champú, que no tiene por qué ser caro. Ahora estoy usando uno de Sedal. También me aplico aceite de argán de la marca Moroccan Oil –que compro en tiendas especializadas en peluquería– sobre el pelo recién lavado.

En movimiento

"Me muevo en bicicleta para todos lados y subo el Cerro San Cristóbal pedaleando algún día del fin de semana. También camino mucho y practico hace cuatro años yoga ashtanga. Dos veces a la semana a la comunidad en la que vivo va la profesora Carolina Pastrián (carolinapastrian@gmail.com) y una o dos veces más por semana practico sola".

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