La primera mujer DT

Primero dirigió a niños, jóvenes y a equipos de mujeres en Medio Oriente, hasta que hace dos semanas la portuguesa Helena Costa se convirtió en la primera entrenadora de fútbol en un equipo profesional de hombres, tras ser nombrada como directora técnica del club francés Clermont Foot 63.




Paula 1149. Sábado 7 de junio de 2014.

Primero dirigió a niños, jóvenes y a equipos de mujeres en Medio Oriente, hasta que hace dos semanas la portuguesa Helena Costa se convirtió en la primera entrenadora de fútbol en un equipo profesional de hombres, tras ser nombrada como directora técnica del club francés Clermont Foot 63.

Aunque su familia no era fanática del fútbol, a Helena Costa este deporte empezó a fascinarle desde muy temprano: cuando chica, en vez de jugar con sus muñecas, prefería sacarles la cabeza y convertirlas en pelotas para jugar fútbol. El balompié nació con ella, como si fuera una vocación, dice. Por eso decidió estudiar Educación Física y ya antes de los 20 años dirigía a equipos de fútbol. A los 21 hizo su primer curso de Dirección Técnica y luego un máster en análisis de juego, además de obtener la licencia más alta que existe para los entrenadores en la liga europea. Su sueño era llegar a la liga profesional masculina por ser la más competitiva del mundo, hasta que el 22 de mayo, a sus 36, lo logró: se convirtió en la primera mujer DT de un equipo profesional de hombres en el club francés de segunda división Clermont Foot 63.

"Quiero que me miren como una entrenadora normal, como un entrenador que tiene que ser evaluada por el trabajo que hace, no por ser mujer", comentó, nerviosa, Helena Costa en su presentación ante los expectantes hinchas de su nuevo equipo.

Helena está consciente de que su nuevo rol es un hito para las mujeres dentro del fútbol, aunque ella no es una recién llegada a este mundo: fue la primera mujer en el equipo de veedores del Celtic de Escocia y entrenó durante 13 temporadas a las categorías menores del Benfica de Lisboa.

"Ha sido difícil", ha dicho. "Siempre me he topado con comentarios prejuiciosos, del tipo '¿qué significa esto? ¿Cómo una mujer puede ser la entrenadora?', pero después de un rato a todos deja de importarles". Eso también es lo que espera que ocurra en Francia.

Aunque no se considera para nada feminista, la vuelve loca que no se pueda alcanzar un objetivo por el solo hecho de ser mujer. Vivió de cerca estas limitaciones cuando armó y se hizo cargo de las selecciones femeninas de Qatar e Irán por cuatro años, donde debía entrenar cubriendo su pelo y brazos y fue muy difícil para ella tomar decisiones en su propio trabajo. Ahora, su nueva misión en el Clermont Foot ha generado gran expectación. Figuras del fútbol han aplaudido la noticia, como el entrenador del Chelsea José Mourinho –uno de los principales referentes de Helena– que dijo que este era un momento crucial para las entrenadoras porque puede abrir la puerta para otras. "Quiero que se me mire como un entrenador normal, como un entrenador que tiene que ser evaluado por el trabajo que hace, no por ser mujer", comentó nerviosa la DT en su presentación ante los expectantes hinchas de su nuevo equipo.

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