Una novela inolvidable

El diablo en el cuerpo, de Raymond Radiguet, es una de las novelas contemporáneas más excepcionales: un amasijo de pasiones en manos de un adolescente que mira la guerra desde el aburrimiento colegial. Escrita hace casi cien años, una impecable nueva traducción la trae de regreso.




Paula 1167. Sábado 14 de febrero de 2015.

El diablo en el cuerpo, de Raymond Radiguet, es una de las novelas contemporáneas más excepcionales: un amasijo de pasiones en manos de un adolescente que mira la guerra desde el aburrimiento colegial. Escrita hace casi cien años, una impecable nueva traducción la trae de regreso.

Raymond Radiguet vivió apenas 20 años, entre 1903 y 1923, y su nombre quedó inscrito en los anales de la literatura contemporánea por esta novela, que escribió a los 17 y fue un suceso en el París sacudido por la primera guerra mundial y atizado por las vanguardias que proponían un arte nuevo y descarado. De inmediato se lo consideró un nuevo Rimbaud, el poeta adolescente de Una temporada en el infierno, quien tras mostrar esos versos fenomenales y escandalizar por su tormentosa relación con el poeta Verlaine, desapareció del mundo conocido para terminar como traficante de armas y morir a los 37. Radiguet tuvo un destino similar, aunque más diáfano: tras escribir sin parar en la prensa y ser pareja del gran creador Jean Cocteau, murió a causa del tifus, tranquilo y casi estático tras haber dejado los salones y los vicios propios de su tiempo. En ambos escritores, con más o menos tormento, la oscuridad representada por el infierno y el diablo salieron a la luz para renovar la literatura y mantenerse, para siempre, como obras innovadoras.

Hoy El diablo en el cuerpo se lee como escrito ayer, más en esta nueva traducción del escritor chileno Oscar Luis Molina, publicada por Tajamar. El relato parece seguir la estela de las grandes novelas francesas, como Rojo y negro de Stendhal y Madame Bovary de Flaubert: es una historia de amor prohibido con consecuencias tristes y alto voltaje sicológico. Pero los deseos ardorosos y destructivos, como en los clásicos que observa, Radiguet los convierte en algo mucho más pedestre, en una excursión de vitalidad y desparpajo que se regocija en su egoísmo, en su tontería y en su ignorancia. Todo lo sublime y lo trágico, así como la ética de sostener una voluntad, se desarman: el protagonista, de 15 años, enamora a Marthe, dos años mayor que él, fatalmente prometida con un militar que lucha en el frente. Mientras ellos se divierten, mienten y padecen, la guerra y la traición siguen su curso inevitable.

Más que novela de aprendizaje, de educación sentimental o de amor, El diablo en el cuerpo es la encarnación de un horizonte mental que se construye a sí mismo a través, y a pesar, de los otros. Pues aunque todo se trata de relaciones, de los demás, la fuerza imperiosa de ese cuerpo es el que aparece con una normalidad pasmosa, con una alegría descreída que lo impulsa a una vida feliz al fin imposible. La muerte de Radiguet, real e irremediable, sella el destino del libro.

$14.500 en Metales Pesados.

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