Limpieza primaveral

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Llega la primavera. Para bien y para mal. Para algunos, esta temporada es felicidad total; empiezan los panoramas afuera, asados, paseos, cambio de aire. Para otros, la primavera trae depresión y alteraciones en el ánimo, debido a los cambios de luz. En cualquiera de los dos grupos podemos hacer ciertas prácticas que nos ayudan, ordenan, limpian y ventilan.

Y este es el famoso "spring cleaning" o limpieza primaveral. Esta práctica viene de países con inviernos muy fríos, donde el tipo de ropa cambia drásticamente cada estación, y donde el cambio de clima es también muy notorio, pasando por inviernos de 15 grados bajo cero y varios metros de nieve a veranos con 38 grados de calor y 100% de humedad. Por lo que llegando la primavera llega la hora de cambiar. Cambiar de aire, de clóset, cambiar la casa. Básicamente este sistema consiste en abrir ventanas, ventilar, sacudir, desempolvar. Y esta tarea del hogar es ideal hacerla en familia. La podemos pensar por pieza y que cada dueño se encargue de sus metros cuadrados, o si son hijos muy chicos podemos darles pequeñas tareas y labores.

Paso 1: partir por mover muebles y aspirar. Debido a la poca lluvia de este año, siento que hay más polvo que nunca dentro de las casas, por lo que el aspirado es el primer paso y puede ser una gran misión para un hijo o hija.

Paso 2: sacudir el limpiapiés de la entrada de la casa, las alfombras, los cojines, los monos de peluche. Incluso puede llegar a ser una acción media terapéutica y liberadora. Sacudir las malas vibras, sacudir los malos momentos vividos, sacudirlo todo.

Paso tres: limpieza de vidrios. También una súper buena tarea para niños. La cantidad de polvo y smog que puede haber en un vidrio es impactante, así que pásenles una botellita con spray y papel de diario para limpiar todos los vidrios que estén a su alcance.

Paso 4: limpieza de refrigerador. Muchas veces acumulamos frasquitos, botellitas, conchos de cosas que van quedando por ahí. Es ahora cuando sacamos eso y botamos todo lo que esté expirado, vencido, rancio. Y ya que estamos en el sector electrodomésticos, podemos limpiar a fondo el horno, la lavadora, sacar y aspirar las pelusas milenarias de la secadora, limpiar la tostadora de pan y el microondas. Para estas tareas la mezcla de vinagre, limón y bicarbonato son lo único que necesitamos como limpiadores, y de paso es amigable con el planeta, que tanto necesita de pequeñas acciones de cada uno.

Paso 5: lavar los forros de cortina y la cortina de las duchas. Y aprovechemos de vaciar todos los cajones o muebles del baño para ver qué sirve, qué no sirve, qué usamos y qué no. En familias con muchos hijos, muchas veces los cepillos de dientes superan en cantidad al número de integrantes de la familia, y ya nadie sabe para quién trabaja. Quizás llegó el momento de comprar de una vez por todas esos ganchitos o repisas donde cada cepillo de dientes tiene su lugar.

Paso 6: ordenar el clóset o lugar donde guardamos toallas, sábanas y ropa de cama. Ideal sacar todo y volver a doblar ordenadamente. Un buen dato es meter cada juego de sábanas dentro de su propia funda de almohada, para después no tener que bucear cada cosa. Y aprovechar de ver lo que quizás no usamos y regalárselo a alguien que pueda necesitarlo.

Paso 7: atacar los clósets. Sacar toda la ropa y pegarse un "Marie Kondo". Deshacernos de esas cosas con las que tenemos un vínculo emocional que no entendemos, pero realmente no usamos hace 5 años. También podemos guardar en cajas plásticas toda la ropa invernal, parkas, botas y chalecos ultra abrigados, para dar paso a la ropa que comenzamos a usar en la primavera. Así alivianamos el clóset y tenemos mejor acceso y vista a lo que estaremos usando en los siguientes meses. Lo mismo para el clóset de los hijos, en los que a veces tenemos ropa de tallas que ya no les quedan. Ideal también regalar y donar todo lo que no usamos que esté en buen estado a alguien que lo necesite y que le va a dar una segunda vida.

Paso 8: enfrentar el ítem cantidad de juguetes. Sabemos que los niños juegan finalmente con tres juguetes, pero tienen cerros de éstos y en algunos casos cantidades obscenas que además no necesitan. También se van rompiendo y se pierden piezas, y quedan en el fondo del cajón de juguetes mini cadáveres que son basura. Y en este paso es también ideal que entren los niños a mirar su mundo. Hacerlos pensar qué usan y que ya no usan, y qué probablemente no volverán a usar.

Paso 9: la caja de los remedios o botiquín. Revisar que frasquitos o cajas están vacíos, limpiar el jarabe que se dio vuelta hace meses, botar el termómetro malo y el "puff" vacío y ver qué nos puede faltar para reponer.

Esto tiene que ser entretenido, así que pueden hacer un playlist en donde todos los miembros de la familia agreguen sus canciones favoritas. Ese día usen ropa cómoda, pelo modo "cola de caballo alta", música a todo volumen, y que empiece este "spring cleaning", que, de seguro, no solo ayudará a limpiar la casa, sino que también el alma y el ánimo familiar.

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