hong kong La isla de las contradicciones

Hong KongLa isla de las contradicciones. La ciudad de Hong Kong es una isla, pero no está aislada. Es parte de China, pero es como si no lo fuera. Está en Asia, pero sus rascacielos parecen sacados de Manhattan. Durante cinco días y sus noches, Sebastián Utreras, fotógrafo de Paula, retrató las calles de esta ciudad única, ex colonia británica y desde 1997 Región Administrativa Especial de la República Popular China.




Hong KongLa isla de las contradicciones. La ciudad de Hong Kong es una isla, pero no está aislada. Es parte de China, pero es como si no lo fuera.

Está en Asia, pero sus rascacielos parecen sacados de Manhattan. Durante cinco días y sus noches, Sebastián Utreras, fotógrafo de Paula, retrató las calles de esta ciudad única, ex colonia británica y desde 1997

Región Administrativa Especial de la República Popular China.

Por Sebastián Utreras lizana

Agradecimientos a Air Canada, que vuela 5 veces a la semana a Toronto y desde allí tiene vuelos diarios a Hong Kong.

En el colegio, los niños estudian las bases de la lectura y la escritura cantonesa y todos hablan inglés desde pequeños. Se acercan a los turistas y les hacen cuestionarios. Es parte de un programa que tienen las escuelas para que los niños practiquen el idioma. Todos hacen las mismas preguntas: de dónde vienes, cuánto tiempo llevas en Hong Kong, qué es lo que más te ha gustado.

Las tres partes que componen la Región Administrativa Especial de Hong Kong –la isla y ciudad de Hong Kong, la parte continental de Kowloon y los Nuevos Territorios, incluida la isla de Lantau– fueron adquiridas y arrendadas por el Reino Unido a mediados del siglo XIX. Mediante un tratado, China recuperó Hong Kong sólo 200 años después, el 1 de junio de 1997. A partir de entonces, una de las zonas con mayor libertad económica en el mundo pasó a ser controlada por un régimen comunista. Sin embargo, China prometió que bajo la política "un país, dos sistemas", la economía socialista no se aplicaría en Hong Kong durante 50 años, es decir, hasta 2047. Así, salvo en las relaciones exteriores y defensa, Hong Kong goza de gran independencia. En esta ciudad conviven tecnología y tradición, riqueza y pobreza, empuje económico y contaminación. Miles de personas se congregan alrededor de un buda gigante y otras frente a una escultura de Bruce Lee, arriba en la foto.

En la ciudad las camas siempre están tibias. Como no hay espacio suficiente para todos, mientras unos trabajan, otros duermen. Cuando unos se levantan, otros se acuestan. No hay manera de evitar atochamientos inmanejables de vehículos y de gente, el colapso de la ciudad. En toda la Región Administrativa Especial de Hong Kong viven casi 7 millones de personas. Lo mismo que en la Región Metropolitana de Santiago. Sin embargo, la densidad habitacional alcanza allá a los 6.356 habitantes por km2, es decir, 14 veces más que en nuestra congestionada capital. En la imagen, un registro de las fotografías que suelen tomarse los turistas junto a la Flor de Loto, una escultura ubicada justo al frente del edificio Centro de Convenciones y Exhibición de Hong Kong.

Hay gente que compra en tiendas de famosos diseñadores europeos, toma café en el Starbucks, y transita en Rolls-Royce y paga millones por una patente que termine en 8, el número de la riqueza, mientras los trabajadores hongkoneses viven lejos del glamour de su ciudad. Familias enteras tienen que subir veinte pisos a pie para llegar a su departamento, porque los edificios en los que viven no tienen ascensores, para abaratar costos. Los monjes se mueven en metro. Los pescadores artesanales abastecen a los restaurantes más turísticos de peces globo. Y algunos hongkoneses simplemente viven en la calle, a los pies de rascacielos de lujo, siempre envueltos en el olor putrefacto que inunda la ciudad entera. El Metre del Hotel Intercontinental rebana con agilidad un Pato Pekín, plato típico del país oriental. En la imagen de arriba, un pez globo es expuesto en un mercado de pescadores de Isla Lamma, ubicada en la costa cercana a Hong Kong. ™

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