Por qué el estrés engorda y los malos hábitos alimenticios de los chilenos

Paula 1146. Sábado 26 de abril de 2014.

Dawn Cooper (64) lleva cuarenta años dedicada a ayudar a los chilenos a bajar de peso y, más importante aún, "a enseñarles a comer bien", dice instalada en el Centro de Salud Holística Sanar, que abrió hace tres años junto a un equipo de sicólogos, terapeutas florales, odontólogos, kinesiólogos, acupunturistas y profesores de yoga, ya que "las personas somos mente, cuerpo y espíritu, y estos tres componentes son igualmente importantes para lograr y mantener el peso adecuado".

Cooper es parte de la primera generación de nutricionistas de la Universidad de Chile. Egresó en 1971 y un año después, mientras en Chile se combatía la desnutrición infantil y nadie hablaba de obesidad, partió a Sídney y se incorporó al Royal North Shore Hospital, donde trató a sus primeros pacientes obesos. A su regreso, en 1974, puso una consulta en su casa, donde atendía a mujeres aplicando la terapia Weight Watchers, que conoció en el hospital australiano, basado en el sistema de Alcohólicos Anónimos. A fines los 70, en Estados Unidos conoció los beneficios de la aeróbica y la implementó en su consulta. En los ochenta realizó cursos de posgrado en la Escuela de Medicina de Harvard, donde conoció la medicina complementaria -que combina medicina tradicional con terapias alternativas-, abrió su centro Dawn Cooper Health Center (primero en Los Leones y después en el Omnium) y, en 1984, fue la primera nutricionista en tener un espacio en la televisión como parte del matinal de Canal 11. A mediados de los 90, fue de las pioneras en ofrecer pilates y, hace cinco años, se convirtió en la primera nutricionista con un pos grado en Medicina Biorreguladora en la Universidad Mayor, espacio antes reservado exclusivamente para médicos. Trabaja, también, hace 20 años en la Departamento de Reproducción Humana de la Pontificia Universidad Católica.

"El principio de la medicina biorreguladora es ayudar al sistema inmunológico y así permitir que el cuerpo se sane y alcance un equilibrio a través de micro estímulos o dosis minúsculas de plantas, minerales y remedios homeopáticos, con técnicas similares al principio de las vacunas cuando insertan la enfermedad para que el cuerpo genere anticuerpos que lo defiendan", explica Cooper.

"La moda detox me parece peligrosísima. Los ayunos extendidos pueden provocar bajas de presión o hipoglicemia, ya que cuando dejas de comer, después de 24 horas el cuerpo empieza a autoconsumirse para sacar calorías de alguna parte. Los músculos y el corazón necesitan proteínas y si no las tienen hay un alto riesgo de que comiencen a fallar".

Ahora estás trabajando con la medicina nutrigenómica. ¿Cuáles son sus principios?

La nutrigenómica considera que cada persona procesa de manera distinta los alimentos, por lo que cada una debiese tener un plan de alimentación específico. Ese plan se diseña a partir de los resultados que arrojan exámenes genéticos basados en una muestra de saliva. Nosotros tomamos la muestra y la mandamos a la Universidad de Toronto. Allí, a partir de siete variables —vitamina C, ácido fólico, granos integrales, cafeína, sodio, grasas saturadas y grasas omega 3— se analiza cómo la persona absorbe los nutrientes y cómo cada tipo de alimento afecta su organismo. Eso determina qué alimentos son fundamentales para su dieta y cuáles no. Por ejemplo, yo soy una mala procesadora de cafeína, por lo que tengo que consumir poco café y por ningún motivo tomar bebidas cola, ni siquiera light, ya que si consumo estimulo en exceso mi sistema nervioso y me cuesta dormir, algo que a un buen procesador no le ocurre. El futuro de la medicina es la personalización a través del código genético. Ahora hicimos una pausa en la implementación de nuestros planes con nutrigenómica, que son los primeros que se ofrecen en Chile, porque en la Universidad de Toronto, donde son pioneros, están incorporando dos nuevos elementos: el gluten y la lactosa.

¿Cuáles son los hábitos alimenticios más dañinos de los chilenos?

Aún no se entiende la relevancia del desayuno. Como primera comida del día, tras varias horas de ayuno, activa todo el sistema hormonal. Por ejemplo, el cortisol, que es la hormona que regula el nivel de azúcar en la sangre y estimula el metabolismo para el procesamiento de grasas, proteínas y carbohidratos, se activa con la luz del día, pero puede seguir trabajando bien gracias al desayuno. Otro hábito que hay que erradicar es el de no comer nada durante el día para luego llegar a casa y comer en grandes cantidades. Del 67% de sobrepeso que tenemos en la población chilena, según cifras del Minsal, una buena parte tiene la costumbre de tomar once comida. Lo correcto es comer varias veces durante el día y en la noche comer algo liviano. Porque, además, cuando ya comiste demasiado, las hormonas se ven estimuladas y se genera el desvelo. Correr todo el día también es un hábito nefasto. El estrés engorda, aunque comas poco, ya que genera que el cuerpo libere exceso de cortisol, lo que aumenta los niveles de insulina que hace que incremente la grasa abdominal. Y es peor todavía cuando la gente está demasiado pendiente de si subió o bajó medio gramo, ya que se genera una especie de autoboicot en el organismo, y aumentan las ganas de consumir hidratos de carbono.

¿Qué productos hay que erradicar de la dieta?

Las toxinas: los insecticidas que les echan a los vegetales y los preservantes y colorantes químicos de las comidas envasadas son un peligro, ya que nuestro cuerpo no está preparado para recibirlos y como consecuencia, sobrecargamos órganos como el hígado, que es el encargado de depurar lo que comemos, o los riñones y el intestino. A eso hay que sumar los productos con grasa saturada y azúcar, que hay que reducirlos al mínimo, como también ingredientes refinados como la harina y la azúcar blanca, sin nada de fibra y que generan adicción. Y hay que evitar los productos envasados en recipientes plásticos, ya que pueden contener disrruptores endocrinos que alteran el sistema hormonal y pueden llevar a problemas como los partos prematuros, la diabetes y el cáncer. Hay que evitar comprar, incluso, verduras envueltas en bolsas, y jamás calentar la comida en envases plásticos.

"En Chile aún no se entiende la relevancia del desayuno. Como primera comida del día, tras varias horas de ayuno, activa todo el sistema hormonal y despierta el cortisol, hormona que regula el nivel de azúcar en la sangre y estimula el metabolismo para el procesamiento de grasas, proteínas y carbohidratos".

Hay una fuerte corriente detox. ¿Qué opinión tienes al respecto?

Me parece peligrosísimo. Si tomas jugos de fruta durante un día no te va a pasar nada malo, pero los ayunos extendidos pueden provocar bajas de presión o hipoglicemia, ya que cuando dejas de comer, después de 24 horas el cuerpo empieza a autoconsumirse para sacar calorías de alguna parte. Los músculos y el corazón necesitan proteínas, y si no las tienen hay un alto riesgo de que comiencen a fallar. Además, si se hace para bajar de peso, no sirve: lo que se pierde es puro líquido y como rebote te baja un hambre espantosa, te lo comes todo y engordas. No hay que dejar de comer para desintoxicarse. Basta con comer sano.

¿Por qué trabajas con terapias alternativas, como la acupuntura o las Flores de Bach?

Si una persona tiene bronconeumonía hay que darle antibióticos, pero también necesita remedios naturales para fortalecer sus defensas. Muchos de los medicamentos que tomamos partieron del principio de una planta y luego se sintetizaron en píldoras. La aspirina partió del sauce. Entonces para mí es ignorancia decir que las terapias alternativas o naturales no sirven o que son puro placebo. Si no existen suficientes estudios científicos se debe a que para hacer los experimentos se necesita financiamiento, pero los laboratorios grandes, que son generalmente los que pagan los estudios, no están interesados en saber si existen otras alternativas a la medicina tradicional, porque su negocio está en producir los remedios. En mis casi cuarenta años de carrera, sí he visto resultados.

En estos 40 años, ¿cuál es el cambio más relevante que ves en los pacientes que llegan a tu consulta?

La obesidad infantil. Cuando comencé me llegaba un niño obeso cada tres meses. Hoy me llegan, incluso, dos diarios. Esos niños siempre son parte de familias que comen mal. Son hijos de una madre que no come verduras ni frutas, o mamás que deben poner a sus hijos a dieta, pero ellas se comen una torta frente a sus ojos. Los padres son el parámetro alimenticio de sus hijos.